A todos los escritores nos ha pasado esto del bloqueo creativo. Sentarse frente a una hoja en blanco, ya sea en papel o en la pantalla, y quedarse inmóvil, como si de repente todas las ideas, las palabras, las ganas de escribir, se hubieran evaporado. Ese temido momento, el bloqueo creativo, es un compañero inevitable del proceso de escritura. Sin embargo, aunque es incómodo y frustrante, no es invencible.
Hoy quiero compartir algunas de las estrategias que me han ayudado a superar esos días de bloqueo creativo. ¡Espero que también te sean útiles!
1. Acepta el bloqueo creativo, no lo combatas
Lo primero que debes hacer es aceptar que el bloqueo creativo es parte del proceso. No te castigues por no ser productiva todos los días. La presión solo empeora la situación. Aceptar el bloqueo como algo temporal es un primer paso para liberarte de la ansiedad. A veces, el simple hecho de dejar que el día pase sin obligarte a escribir puede resultar en un avance al día siguiente.
2. Cambia de actividad
Cuando te sientes bloqueada, forzarte a seguir escribiendo a menudo no funciona. En su lugar, cambia de actividad. Haz algo completamente distinto: sal a caminar, cocina, escucha música o practica algún deporte. Cambiar el foco de atención permite que la mente se despeje, y muchas veces las ideas empiezan a fluir cuando menos lo esperas.
3. Escribe sin expectativas
A veces, el bloqueo creativo proviene de una autoexigencia excesiva. Quieres que cada palabra sea perfecta, que cada frase sea brillante desde el primer borrador. Pero la escritura no siempre funciona así. Intenta escribir sin pensar en la calidad, solo por el acto de escribir. Aunque lo que salga no sea perfecto, habrás logrado desbloquearte y podrás editar más tarde. Yo suelo hacer un «brain dump», que es básicamente volcar todo lo que me pasa por la cabeza sin preocuparme por el resultado.
4. Haz ejercicios de escritura para superar el bloqueo creativo
Otra técnica que me ha funcionado es realizar ejercicios de escritura. Hay muchos desafíos rápidos que puedes probar: escribir un relato en diez minutos, hacer una descripción de un personaje que veas en la calle o empezar una historia con una frase al azar. Estos ejercicios activan tu creatividad y te ayudan a reconectar con el proceso de escritura de manera divertida, sin la presión de crear algo «serio».
5. Relee algo que hayas escrito y te haga sentir orgullosa
A veces, el bloqueo viene de la inseguridad. Dudas de tus habilidades, de la calidad de tu trabajo, y eso te paraliza. En estos casos, suelo releer pasajes de escritos anteriores que me hacen sentir orgullosa. Es un recordatorio de que sí, puedo hacerlo, y de que este bloqueo es solo temporal. Recordar tus logros te devuelve la confianza y te impulsa a seguir adelante.
6. Cambia el formato o el lugar de escritura
Cambiar la forma en la que estás escribiendo también puede ser muy útil. Si normalmente escribes en el ordenador, prueba escribir a mano. El simple cambio de medio puede desbloquear algo en tu mente. Del mismo modo, cambiar de lugar, escribir en una cafetería, en un parque o en una biblioteca, puede darle un aire fresco a tu proceso.
7. Habla con otros escritores
Compartir el bloqueo con otras personas que entienden lo que estás pasando puede ser muy liberador. A menudo, hablar con otros escritores o personas creativas sobre sus propios bloqueos te hace sentir menos sola y puede ofrecerte perspectivas nuevas. Además, las conversaciones pueden despertar ideas o soluciones que no habías considerado.
8. Lee libros o escucha podcasts sobre escritura
Cuando siento que me falta inspiración, me gusta leer libros sobre el oficio de escribir o escuchar podcasts de escritores. A veces, escuchar cómo otros autores enfrentan sus propios desafíos te da fuerzas para enfrentarte a los tuyos. Algunos de mis libros favoritos sobre escritura son Mientras escribo de Stephen King y El gozo de escribir de Natalie Goldberg. Son lecturas que, además de dar consejos, te motivan a seguir adelante.
9. Recuerda por qué empezaste a escribir
Cuando el bloqueo parece interminable, siempre intento recordar por qué comencé a escribir en primer lugar. ¿Qué es lo que me hizo enamorarme de este oficio? ¿Qué sentí la primera vez que escribí algo que me emocionó? Volver a conectarte con esa pasión inicial, con las razones que te impulsaron a escribir, puede ser el empujón que necesitas para seguir adelante.
10. Sé paciente contigo mismo, el bloqueo creativo se supera
Por último, pero quizás lo más importante, es ser paciente. El bloqueo creativo no durará para siempre, aunque en los momentos más difíciles parezca interminable. La creatividad es cíclica, hay días buenos y días malos, pero siempre regresa. Cuanto más relajada y paciente seas contigo misma, más pronto lo superarás.
El bloqueo creativo es frustrante, pero también es una parte natural del proceso de escribir. Lo importante es recordar que no estás sola en esta lucha y que existen muchas maneras de enfrentarlo. Y cuando lo superas, cuando finalmente las palabras vuelven a fluir, la satisfacción de escribir es aún mayor.
¿Cómo enfrentas tú el bloqueo creativo? ¡Os leo en mis redes!